Casos comunes en el derecho de familia
El Derecho de Familia es aquel que engloba todos los casos en los que participa, como su propio nombre indica, la familia. Puesto que son litigios en los que el apego con las personas a las que nos enfrentamos es sustancial, resulta evidente lo delicados que pueden llegar a ser.
Nadie espera tener que plantar cara a un ser querido en los tribunales; no obstante, los datos no mienten. Estos procedimientos judiciales son más habituales de lo que uno suele pensar. Así que en lugar de poner en peligro toda tu estabilidad psicológica e incluso financiera, es importante que te pongas manos a la obra para encontrar a los mejores especialistas de dicho sector.
Divorcios, cómo poner fin a una relación
Aquello de “juntos para siempre”, por mucho que nos repitan en los cuentos que es lo más habitual del mundo, tiende a resultar más una utopía que algo común. Los casos de divorcio han crecido de forma sustancial en las últimas décadas, lo cual ha provocado una naturalización de estos casos para que sepamos cómo actuar en cada caso.
Lo más recomendable es seguir la vía del mutuo acuerdo. En estos casos, el abogado de familia lo tendrá muy fácil para cerrar el litigio con rapidez y sin impacto emocional en quienes pasan por la separación. Sin embargo, si las discusiones y los rencores salen a la luz, tocará aplicar la vía contenciosa. Un proceso mucho más largo que obliga a pasar por los tribunales.
Ahora bien, en ambos casos el abogado será el responsable de conseguir que aspectos como la custodia de los hijos, la liquidación de gananciales o la pensión queden bien fijados. Un trabajo que debe hacer desde la cercanía, asegurando que sabes en todo momento qué pasos estás dando.
Herencias sin discusiones con los seres queridos
El fallecimiento de un ascendiente es ya de por sí una situación dramática como para que, además, venga acompañada de discusiones entre los herederos. Pelear con un hermano, primo o cualquier otro familiar no es plato de buen gusto, de ahí que los abogados de familia sean esenciales.
El primer rol que ocupan estos profesionales es el de hacer la lectura del testamento y asegurar que todo responde a los márgenes legales correspondientes. Una figura que trabaja desde la objetividad para compartir con los descendientes la última voluntad del fallecido.
No obstante, si alguno de los implicados no está de acuerdo, los abogados de familia también salen en su defensa para presentar reclamaciones. Un proceso duro en lo psicológico para el que hay que estar mentalmente preparado; garantizando que la justicia actúa como corresponde.
Encuentra a los profesionales mejor cualificados del sector
Como habrás podido observar, los supuestos previamente planteados no son lejanos a un gran número de familias. Todo puede ser alegría y amor hasta que tocan nuestro bolsillo. Por consiguiente, si estás pasando por alguna de las circunstancias anteriores, lo mejor es que te pongas manos a la obra para encontrar los mejores despachos especializados.
Más allá de que el bufete en cuestión cuente con profesionales en la rama del derecho de familia y que tengan una gran experiencia en el campo, es importante que te fijes en valores de índole más personal. Tras la primera visita podrás anticipar cómo de cercanos van a ser los abogados en cuestión y cuánto se van a implicar en tu caso en particular. ¡Quédate con los que realmente se preocupen por ayudarte!
